Inauguración

Tiempo atrás hice un blog de nombre similar a este llamado "El Rincón del Boludo", en donde me quejaba de distintas cosas intentando ser lo menos políticamente correcto posible. Como mis ganas de invertir tiempo y energía en producir textos por el mero placer de hacer catarsis desaparecieron rápidamente, hice uso del sensacional botoncito "borrar todo a la mierda" y, por arte de magia, otro blog más desapareció del caudal de basura informática que es la Internet. En fin, a pesar de que estoy en medio de mesas de exámenes y que tengo un par de obligaciones fuera de lo que es rendir y cursar, el alpedismo psicológico (psicológico porque cosas para hacer tengo, y debería estar haciéndolas) me ha llevado a parir otro engendro de mi aburrimiento, uno que transmite la idea del alpedismo en su propio título.

El "Rincón del Alpedismo" es un espacio donde ocasionalmente (nótese: cuando se me canten los huevos) publicaré cosas que me resulten interesantes (nótese: por el motivo que se me canten los huevos) a todos aquellos que les pueda llegar a interesar (nótese: a los que también están al pedo). Como hacer esto no me significa pensar mucho ni destinarle demasiada energía, creo que es algo que voy a poder hacer periódicamente. A los tres pelagatos que están leyendo esto: "difrutenlón".

Quien haya compartido tres minutos de su vida conmigo sabrá que tengo una obsesión por la serie "Dexter", transmitida en la Argentina por el canal FOX, donde muy de vez en cuando sale a flote una joyita como Dexter entre tanta mierda de episodios nuevos de los Simpsons. Acá les dejo una escena de la segunda temporada, la que todavía no se transmite en latinoamérica, en la que se ilustra claramente un método alternativo de lidiar con alguno que otro compañero de trabajo. No me hago responsable de las consecuencias que puedan sufrir por ponerlo en práctica:



¡Cómo me gusta cómo suena ese golpecito!